Tu Perro Te Quiere

Cómo saber si mi perro me quiere – 2a Parte

Esta es la segunda parte del tema «cómo saber si mi perro me quiere».Hay muchas conductas que nuestros perros realizan que son evidencia indiscutible de que nos quieren. Sin embargo, es importante que aprendamos a interpretar correctamente su lenguaje para evitar confundir con demostraciones de afecto, acciones y conductas que en realidad significan algo distinto. La primera parte de esta publicación la puede ver aquí: ¿Cómo saber si tu perro te quiere? (en realidad) – Primera Parte

Lamer con insistencia, volverse loco y hasta hacerse pipí cuando vuelves a casa

Es normal que nuestros perros nos extrañen y mientras más tiempo nos separamos de ellos, con mayor efusividad nos saludarán al volver. Eso es señal del vínculo afectivo tan fuerte que existe entre tu perro y tú.

Sin embargo, si la emoción se vuelve incontrolable para tu Super Cachorro a tal grado que se hace pipí o se pone a destruir cosas, tu perro necesita tu ayuda.

Las emociones extremas no son buenas pues generan demasiado estrés a nivel interno.

Imagínate que tú te emocionaras tanto hasta sufrir incontinencia urinaria… eso no está bien.

Si esta alteración emocional extrema en tu perro, no es superada, el problema de ansiedad se irá extendiendo a otras áreas.

Algunos remedios para esta conducta son:

  • Disminuir el apego entre tu perro y tu.
    • No lo cargues demasiado y procura en mayor medida su independencia.
    • En casa cuando estés con él no permitas que demande tu atención al 100% y dale más actividades para que realice el sólo (darle juguetes interactivos que estimulen su mente y favorezcan la concentración le ayudará mucho).
  • Cuando te vayas de casa, no te despidas de él
  • Cuando regreses, no lo saludes de inmediato. Espera a que se tranquilice y entonces sí salúdalo de manera relajada.
  • Evita las interacciones alteradas, procura acariciar a tu perro de manera calmada.
  • Evita ser estridente.
  • Pide a las visitas que no “le hagan fiestas” a tu perro cuando entren a tu casa.
    • Practica el hábito de pedirle a tu perro que se siente y cuando ya está calmado, entonces que las visitas lo saluden tranquilamente.
  • Nunca regañes a tu perro cuando reaccione haciéndose pipí­. Eso solo lo pondrá más nervioso y acentuará el problema. Lo mejor es ignorarlo y permitirle calmarse sin prestarle atención.

Interponerse entre una mujer embarazada y las demás personas

Cuando una familia espera un bebé, es común creer que el perro en la familia “sabe” que viene un bebé en camino. Esto es completamente falso. Lo que realmente ocurre es que el perro es capaz de detectar cambios hormonales en la madre humana así como percibir los cambios en su conducta y movimientos.

Una mujer embarazada no se mueve igual (sobre todo en los últimos meses de embarazo), no se comporta igual, no huele igual e incluso es muy probable que las rutinas de vida empiecen a cambiar.

La llegada del bebé representa muchos cambios en el entorno y en la vida del perro y eso puede alterar su conducta. El hecho de que se muestre “protector” con la madre, no es una buena señal. Esta conducta responde a alteraciones en el entorno y a celos e inseguridad por parte del perro. Dicha conducta podría tornarse peligrosa cuando el bebé nazca.

Aprende más sobre los perros y la llegada del bebé en nuestra sección “Perros, bebés y niños” y recuerda que si necesitas asesoría profesional, puedes recurrir a los Guías Super Cachorros.

Ladra a todo aquél que se acerca a la puerta

Cuidar su territorio es algo natural en un perro ¿por qué? porque ahí se encuentran todos sus recursos valiosos: familia, comida, agua, refugio, juguetes etc.

Es normal que los perros ladren cuando algún extraño se acerca a la puerta, o cuando alguien toca el timbre.

Si tu perro ladra de manera excesiva a todo lo que pasa cerca, ladra con cualquier ruido y de manera repetitiva y constante, esto es más bien una señal de aburrimiento y de que tu perro necesita más actividad tanto física como mental.

Cuando un perro ladra cuando alguien toca a la puerta, no significa necesariamente que esté protegiendo.

Esos ladridos son para comunicarle a su familia que hay alguien en la puerta. Más que ladridos para ahuyentar al posible “intruso” son ladridos para avisarle a todos en casa que acudan a ese llamado.

Para poder entender mejor la relación que tenemos con nuestros perros y poder “escuchar” lo que tienen que decirnos, es vital que aprendamos más sobre su naturaleza como especie y que los conozcamos mejor como individuos.

Para poder aprender lenguaje canino, el origen de muchas conductas, qué emociones sienten, cómo perciben el mundo y cómo comunicarte mejor con tu perro, te sugerimos cursar nuestro seminario gratuito «Lenguaje canino».